Realizar la actividad de cazar requiere tener una licencia, para la cual previamente se debe contratar un seguro obligatorio. La licencia de caza puede obtenerse a partir de los 14 años con autorización de los representantes legales.
Coberturas de caza
El seguro obligatorio de caza que cubra mínimo la responsabilidad civil hacia terceros es obligatorio para obtener la licencia de caza en España según el Reglamento de Seguro de Responsabilidad Civil del Cazador de suscripción obligatoria. Aun así, el seguro se rige por la normativa de actividad cinegética de las Comunidades Autónomas y la Ley 1/1970 de Caza.
El Reglamento establece unos límites cuantitativos a la cobertura de daños físicos a la víctima de 90.151,82€ y recoge daños cubiertos incluidos que son los daños por disparo involuntario del arma y los daños ocasionados en tiempo de descanso, mientras se realiza la actividad cinegética dentro del terreno de caza. Cabe añadir, que el seguro de Responsabilidad civil también cubre los daños ocasionados por los perros de caza del asegurado; con ciertas limitaciones. Cubre los daños ocasionados a terceros, no los sufridos por el canino y hasta un máximo de dos perros. Además, si se trata de una raza considerada potencialmente peligrosa, por norma general quedará excluido de la cobertura de la póliza y será necesario contratar un seguro específico.
Aun así, siempre es recomendable dada la actividad, que el seguro obligatorio de caza tenga una mayor cobertura, pues los daños a causa de las acciones de los cazadores, los animales y el uso de armas son muy comunes. La póliza puede incluir, la responsabilidad civil, que cubre los daños a terceros durante la actividad cinegética que es obligatoria, la responsabilidad civil voluntaria, que proporciona mayor protección que la anterior que es solo a terceros y, por último, hay cobertura de los accidentes personales que protegen al cazador en caso de lesiones a su persona. En caso de acudir al extranjero para realizar esta actividad, se debe buscar una póliza que cubra los accidentes y responsabilidad civil en Europa o país al que se acuda.
Exclusiones del seguro obligatorio
También se debe tener en cuenta las exclusiones a la cobertura previstas en el Reglamento. Estas son la obligación de no indemnizar porque el hecho se deba únicamente por la culpa o negligencia del perjudicado, o por fuerza mayor (se trata de una circunstancia externa, imprevisible o inevitable que no permite cumplir las obligaciones). Ten en cuenta que un fallo en el arma, rotura de la misma o de las municiones, no cuenta como fuerza mayor. Además, como en todo seguro, no se cubre al cazador que sufra un siniestro habiendo consumido alcohol o drogas, si tiene contratado el seguro, pero no la licencia (o esta caducada, ya que la renovación es anual) o si caza en una zona prohibida.
Por otro lado, en caso de ocurrir el accidente en una partida de caza y no conste el autor responderán solidariamente las aseguradoras de los miembros de dicha partida; esto implica que la responsabilidad será concurrente entre los miembros que estuvieran en el ejercicio de caza en el lugar del daño y habiendo utilizado arma igual a la que originó el daño.
En caso de accidente durante la caza, es importante reaccionar rápido evaluando la situación y daños, llama a emergencias o proporciona primeros auxilios. Es importante avisar a las autoridades (Guardia Civil o cuerpo de seguridad) y contactar con tu seguro para la reclamación.
Se debe tener en cuenta que incumplir al Ley de Caza puede ser constitutivo de delito o infracción y que la Seguridad en la cacería viene por vía reglamentaria.
En caso de accidente, la responsabilidad podrá ser del cazador (y su seguro dependiendo de la cobertura y lo que haya pasado), la cuadrilla de caza (la responsabilidad concurrente si no está claro quien es el responsable) y el organizador de la cacería (si se trata de problemas de planificación, seguridad o supervisión).
Acudir a un experto para informarte de tus derechos y de las acciones legales de las que dispones ya seas la víctima del accidente o el responsable, es lo más recomendable en estos casos. Ya sea por vía penal, por los daños causados u homicidio; o por vía civil por reclamación de daños y perjuicios, entre otras.
Sobre el autor:
Legal Trainee
Área de Responsabilidades y Empresa
Sammos Legal Abogados